No voy a engañarte, te escribo esto con la confianza de que pueda tratarse, por fin, de una carta de despedida.
¿Qué quieres que te diga? Es así. Igual te habías creido de verdad lo de Valencia. Sabemos comos somos en estas cosas, el Athletic tiene costumbre de crecerse contra los que no están en su lucha para luego, como hoy, cagarla en los momentos decisivos.
¿Pero qué ibas a hacer tú? Estabas ocupado pregonando que volviamos al buen camino, que había comenzado la reacción, que la buena suerte de Llorente se iba a expandir y por fin recibiríamos lo que con tanta ansia esperabamos...
Encima enfrente, no un cualquiera: Ernesto Valverde. Un viejo conocido al que se recuerda con nostalgia, pero que resulta que este año tiene el agua casi tan al cuello como tú. Él nos mandaba recaditos de ánimo, recordaba que "el Athletic siempre sale a flote"... pero los dos sabíais que en el cesped no iba a haber lugar para colegueo. Os lo estabais jugando todo... y tu nos veías "afianzados", el equipo parecía "capaz" y "eficaz".
Al final hemos fallado en lo mismo que llevamos fallando toda la temporada: somos tan malos que cuando nos sale algo bien ni siquiera nos lo creemos. Yo estaba viendo el partido, y me avergüenza decirlo, pero según se acercaba el pitido final, solo esperaba a ver cuando nos metía el Espanyol ese gol que nos hundiese.
Damos gracias que los de abajo juegan a lo mismo que nosotros, porque si no la cosa estaría realmente cruda. Aunque posiblemente en los próximos días esto no supondrá para ti una preocupación, al menos a nivel laboral.
Puede no ser culpa tuya, pero tienes que reconocer que cogiste un proyecto que te quedaba grande. Escenitas como la que montaste pidiendo disculpas a Etxebe por sustituirle, no hacen si no desacreditarte ante la afición y ante los propios jugadores. Debías haber mandado, haber dirigido este equipo y me parece más bien que te has dejado llevar por los acontecimientos.
Dices que se te ha quedado "mal cuerpo por la derrota", yo insisto en que muchos ya llevabamos el mal cuerpo desde antes de empezar y, sin ser nada personal, esperamos que con tu salida la cosa vaya a mejor.
Espero que esta mala experiencia no haya hecho excesivo daño en tu imagen ni en tu ánimo, y que la próxima vez que se cruce tu camino con el de el Athletic, sea para traer mejores noticias.
¿Qué quieres que te diga? Es así. Igual te habías creido de verdad lo de Valencia. Sabemos comos somos en estas cosas, el Athletic tiene costumbre de crecerse contra los que no están en su lucha para luego, como hoy, cagarla en los momentos decisivos.
¿Pero qué ibas a hacer tú? Estabas ocupado pregonando que volviamos al buen camino, que había comenzado la reacción, que la buena suerte de Llorente se iba a expandir y por fin recibiríamos lo que con tanta ansia esperabamos...
Encima enfrente, no un cualquiera: Ernesto Valverde. Un viejo conocido al que se recuerda con nostalgia, pero que resulta que este año tiene el agua casi tan al cuello como tú. Él nos mandaba recaditos de ánimo, recordaba que "el Athletic siempre sale a flote"... pero los dos sabíais que en el cesped no iba a haber lugar para colegueo. Os lo estabais jugando todo... y tu nos veías "afianzados", el equipo parecía "capaz" y "eficaz".
Al final hemos fallado en lo mismo que llevamos fallando toda la temporada: somos tan malos que cuando nos sale algo bien ni siquiera nos lo creemos. Yo estaba viendo el partido, y me avergüenza decirlo, pero según se acercaba el pitido final, solo esperaba a ver cuando nos metía el Espanyol ese gol que nos hundiese.
Damos gracias que los de abajo juegan a lo mismo que nosotros, porque si no la cosa estaría realmente cruda. Aunque posiblemente en los próximos días esto no supondrá para ti una preocupación, al menos a nivel laboral.
Puede no ser culpa tuya, pero tienes que reconocer que cogiste un proyecto que te quedaba grande. Escenitas como la que montaste pidiendo disculpas a Etxebe por sustituirle, no hacen si no desacreditarte ante la afición y ante los propios jugadores. Debías haber mandado, haber dirigido este equipo y me parece más bien que te has dejado llevar por los acontecimientos.
Dices que se te ha quedado "mal cuerpo por la derrota", yo insisto en que muchos ya llevabamos el mal cuerpo desde antes de empezar y, sin ser nada personal, esperamos que con tu salida la cosa vaya a mejor.
Espero que esta mala experiencia no haya hecho excesivo daño en tu imagen ni en tu ánimo, y que la próxima vez que se cruce tu camino con el de el Athletic, sea para traer mejores noticias.
Hasta entonces, un abrazo.
Sr. Asiertxo
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